Si hay un acontecimiento cierto que ocurrirá en nuestras
vidas, es la muerte. Todos, tenemos la
posibilidad, en la medida que la ley y la capacidad jurídica que poseemos nos
lo permiten; de disponer de nuestros bienes al realizarce una sucesion
Como: Con un Testamento.
Una manifestación de última voluntad, en la cual expresamos quien
queremos que nos suceda, en todo nuestro
patrimonio y que bienes determinados le adjudicaremos a cada heredero.
Esta determinación de un heredero, o de un legatario, tiene que ser precisa. No puede estar condicionada a prohibiciones (por ejemplo, de no casarse,
o de hacerlo con una persona especifica, o mudarse, o no hacerlo etc.).... Continuar leyendo